A pesar de que todas las actividades sociales y económicas dependen en gran medida del abastecimiento de agua dulce y de su calidad, 2.200 millones de personas viven sin acceso a agua potable.
Para concienciar acerca de la crisis mundial del agua y la necesidad de buscar medidas, charlamos con Antonio Oliva, director de I+D de la compañía almeriense New Growing System.
La empresa cuenta con gran espíritu por la innovación centrando sus esfuerzos en la creación y desarrollo de un sistema de cultivo que optimice la escasez de recursos hídricos. El objetivo de la empresa almeriense se centra en el desarrollo de nuevas tecnologías de cultivo que den respuesta a las crecientes necesidades de la agricultura intensiva en regiones áridas y semiáridas del planeta.
Está compuesta por un equipo multidisciplinar con gran experiencia en el sector y, desde sus comienzos, han realizado más de 1.000 proyectos en más de 20 países. “Con este sistema buscábamos aprovechar el suelo ofreciendo un control completo sobre la gestión de cultivos, como ventajas en términos de ahorro, productividad, calidad y utilidad”, explica Oliva.
Nuevas formas de cultivo
En los cultivos hidropónicos, las plantas completan su ciclo vegetativo sin la necesidad de emplear el suelo. Se les suministra la nutrición hídrica y la totalidad o parte de la nutrición mineral a través de una solución en la que van disueltos los diferentes nutrientes esenciales para su desarrollo.
El futuro de la agricultura moderna pasa por el uso óptimo de uno de sus recursos más limitados e importantes: el agua. Se hace imprescindible que en los días venideros la agricultura adopte métodos de cultivo que optimicen al máximo el uso del agua y esto se consigue gracias a los cultivos hidropónicos.
“Las ventajas que ofrece el sistema NGS son las de una tecnología limpia y sostenible totalmente reciclable o plantas más sanas, con menos necesidad de pesticidas”, comentaba el director de I+D.
Cultivo tradicional VS Cultivo hidropónico
Para una planta, el suelo actúa principalmente de soporte. Gracias al sistema desarrollado por la empresa almeriense, las necesidades de la planta se ven cubiertas de una manera más específica que si se realiza el cultivo de manera tradicional.
“Nosotros lo que hacemos es darle a la planta lo que necesita. Podemos aportar a la planta exactamente lo mismo que necesita del suelo solo que en el sistema NGS tiene todo lo que necesita y eso significa conseguir más sabor porque realizas un análisis del agua y utilizas un sistema circular de reciclaje”, ha argumentado Oliva.
Por último, el invitado ha animado a las empresas dedicadas al sector que utilicen estos sistemas que a priori pueden parecer caros pero que resultan rentables en el corto plazo. “Implementando este sistema, el margen de rentabilidad se consigue en meses, en función del producto”, concluyó.