ISABEL RUBIO ARROYO | Tungsteno
De llaveros o zapatos con GPS a códigos QR que se imprimen en una uña y que al escanearlos ofrecen información de contacto de un paciente. Son algunas tecnologías usadas para rastrear a los ancianos con demencia. Esta enfermedad es una de las principales causas de discapacidad y dependencia entre las personas mayores en el mundo, según la Organización Mundial de la Salud. Ante un futuro en el que patologías como el alzheimer pueden alcanzar cifras propias de una epidemia, la ciudad japonesa Itami utiliza un sofisticado sistema de vigilancia en sus calles para rastrear a los afectados.
Más de 1.000 sensores para rastrear a personas con demencia
A medida que las poblaciones envejecen, múltiples países buscan la fórmula para hacer frente al cuantioso gasto que supone el cuidado de personas mayores y convertir las urbes en lugares seguros. Las autoridades de Itami, una ciudad Japonesa de unos 200.000 habitantes, han optado por llenar la ciudad de sensores y cámaras, según recoge el periódico The New York Times. Los más de 1.000 dispositivos están identificados con un dibujo de una persona sonriendo entre unos símbolos de un radar a cada lado.
En teoría, las cámaras instaladas por la ciudad están equipadas con receptores que se comunican con pequeños sensores que llevan consigo los inscritos en el programa. De esta forma, cuando pasan frente a ellas, el aparato registra su posición y la envía al móvil de una persona autorizada. En un principio, este sistema fue presentado como una herramienta para combatir el crimen y supervisar a los menores cuando iban al colegio. Aunque desde 2015 también se puede inscribir en el programa a personas mayores con demencia, no se ha conseguido una implantación masiva con este fin. Mientras que el año pasado casi la mitad de los alumnos de primaria estaban registrados, sólo 190 ancianos utilizaron el programa.
Japón es el país con la proporción más alta de personas con demencia. Crédito: Cuerpo de Marines de Estados Unidos.
La 'epidemia' silenciosa que atormenta a Japón
Uno de los objetivos de este programa es facilitar la vida a personas mayores. Cada vez son más los ancianos que tienen dificultades para recordar, pensar o tomar decisiones, según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos. Si hay un lugar en el que este problema es especialmente acuciante, es Japón: el país tiene la proporción más alta de personas con demencia en el mundo, según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Aunque allí muchas ciudades cuentan con centros de atención diurna para adultos, pueden resultar muy costosos y, en ocasiones, ineficientes para supervisar adecuadamente a los pacientes que suelen deambular. Tal y como indica la OMS, este tipo de enfermedades “pueden resultar abrumadoras no sólo para quienes la padecen, sino también para sus cuidadores y familiares”. En 2007 un hombre de 91 años con demencia fue atropellado en una estación en la ciudad japonesa Obushi, según el portal Japan Today. Años después, un tribunal ordenó a la familia a pagar una indemnización a la compañía de trenes por los retrasos causados en el servicio. Pese a que finalmente la decisión fue revocada, el juzgado había concluido que las medidas que habían adoptado para evitar que el anciano deambulara sólo eran insuficientes.
En Japón se utilizan múltiples tecnologías para rastrear a personas con demencia. Crédito: BBC News.
Un sistema de vigilancia no exento de polémica
Pese a que estos sensores prometen ayudar a localizar a las personas con demencia, a la vez que mantienen cierta independencia, también han suscitado algunas preocupaciones relacionadas con la privacidad. Para empezar, puede ser difícil determinar hasta qué punto y en qué casos un anciano con este tipo de patologías puede dar un consentimiento informado para participar en el programa. Una revisión publicada en la revista International Psychogeriatrics concluye que la decisión sobre si utilizar este tipo de sistemas, cómo y cuándo debería ser tomada de forma conjunta por el paciente, su familia y cuidadores profesionales.
Kumiko Nagata, investigadora principal del Centro de Investigación y Formación en Atención a la Demencia de Tokio, cuenta a The New York Times que las aplicaciones más prometedoras son aquellas que ofrecen mayor libertad a los usuarios al aliviar el miedo a perderse. Sin embargo, le preocupa que este tipo de sistemas “solo se empleen como herramientas para lidiar con personas problemáticas”. Es decir, con cualquiera que se haya convertido en una carga para su familia o los funcionarios. El propio alcalde de Itami, Yasuyuki Fujiwara, afirmó estar preocupado por la percepción que este tipo de sistemas de vigilancia podían tener en la población. Cuando se implementó el sistema, aseguró que no pretendía que los ciudadanos pensaran que se les estaba espiando.
Las autoridades de Itami no han hecho públicos los detalles técnicos de este sistema, pero insisten en que sólo la familia puede revisar dichos datos. No obstante, la dependencia cada vez mayor de todo tipo de sensores y dispositivos conectados por parte de los ciudadanos de todo el mundo brinda nuevas oportunidades a los malhechores y que es difícil garantizar al 100% que este tipo de sistemas no puedan ser pirateados. Tal y como afirma Jürgen Stock, Secretario General de INTERPOL, "los ciberdelincuentes están creando nuevos ataques e intensificando su ejecución a un ritmo alarmante", especialmente desde que comenzó la pandemia.
A medida que el número de personas con demencia aumenta rápidamente en Japón y en todo el mundo, abordar este tipo de enfermedades se ha convertido en una prioridad de salud pública con repercusiones sociales y económicas. Sólo en 2019, el coste social de la demencia a nivel mundial alcanzó los 1,3 billones de dólares, según la OMS. Pese a que algunos sistemas de rastreo pueden resultar útiles para facilitar el día a día de los pacientes y sus familiares, garantizar la privacidad y seguridad resulta fundamental para conseguir que este tipo de tecnologías sean implementadas de forma segura y masiva.
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