Su finalidad es explorar la generación de energía eléctrica renovable a partir de la salmuera producida en el proceso de desalación, con el objetivo de mejorar la eficiencia energética del proceso.
Se trata de evaluar un nuevo proceso de desalación más sostenible que combine la ósmosis inversa con la electrodiálisis inversa. La integración de este proceso con la tecnología convencional permite mejorar la eficiencia energética, gracias a la recuperación de la energía eléctrica contenida en la salmuera obtenida, previamente a su descarga en el mar, y, por tanto, las emisiones de CO2.