La planta desaladora de agua de mar en Sohar, en la costa de Al Batinah, empezó a funcionar en 2019. Esta planta de ósmosis inversa es la segunda más grande del país. Tiene capacidad para desalar 250.000 m3 diarios de agua marina, dando suministro a cerca de 220.000 personas. La desaladora fue diseñada con un objetivo primordial: la optimización del uso del agua y de la energía. Por ese motivo cuenta con un elevado grado de automatización.
El proyecto contó con una inversión cercana a los 200 millones de euros. La empresa pública Oman Power and Water Procurement Company adjudicó esta obra al consorcio liderado por Sacyr Agua (51%), y en el que también participan Oman Brunei Investment Company (25%) y Sogex Omán (24%). El contrato incluía el diseño, construcción, propiedad, financiación, operación, mantenimiento y compra del agua potable durante 20 años.